Si bien Tigre tiene por delante, desde el 17 de septiembre, cuatro partidos del Grupo B de la Copa Libertadores, los refuerzos que van llegando al club de Victoria son pensando más en el ascenso que en el torneo internacional.
Es cierto que aún no se sabe como y cuando continuará la Primera Nacional, pero lo cierto es que la decisión política de la AFA es definir los ascenso en cancha.
Hoy Tigre tiene cinco refuerzos.
Uno es un hombre de la casa, Román Martínez que llega, a su tercer paso por el club, para formar un excelente doble cinco con Sebastián Prediger.
Después está Abel Luciatti. Zaguero zurdo de 27 años. Quedó libre de San Martín de Tucumán. Firmó por 18 meses.
El extremo David Gallardo, que viene de Villa Dálmine, tiene un préstamo por 18 meses. Sin cargo y con opción por el 90% del pase en un monto cercano a los 150 mil dólares.
Y el cuarto es el lateral derecho de Rafaela, Lucas Blondel y el quinto (y no último) es el marcador por izquierda que viene de Temperley, Sebastián Prieto.
Con la defensa armada (se queda el arquero Marinelli, Gerardo Alcoba y, tal vez Moiraghi), ahora el entrenador Gorosito, que también tiene “dominado” el mediocampo, busca rearmar la delantera del “Matador”.
Ante las salidas de Emanuel Denning y Marcelo Larrondo, el entrenador tiene en la mira a dos atacantes, pero estos tienen otra ofertas. El ex jugador de San Martín de Tucumán, Luciano Pons (también lo pretende Argentinos y Banfield) y el goleador de Sarmiento, Pablo Magnin (lo quieren además de Huracán y Talleres de Córdoba).
Se trabaja por el primer contrato de Ivo Kestler, delantero de la reserva de Victoria, y adelante también el DT cuenta con Carlos Luna (a tres tantos de ser el goleador histórico del club) y Enzo Díaz.
Además de Denning y Larrondo, dejaron el club: Ortiz, Pérez Acuña, Mosquera, Ramis, Domínguez Huertas, Cavallaro, Canuto y Lucas Rodríguez.
El primer partido de Tigre en la Libertadores será el 17 de septiembre en Asunción ante Guaraní, a las 23 horas. Por la B Nacional... vaya a saber uno.
