En plena cuarentena en la República Argentina, Juan Román Riquelme,  vicepresidente segundo de Boca, piensa en fútbol todo el día y evalúa los pasos a seguir, para reforzar de la mejor manera a su equipo. Más allá de los gustos de Román, será fundamental saber si Boca es capaz de hacer una erogación importante desde lo económico,  sabiendo que es prácticamente imposible competir con el mercado europeo.

A Riquelme le gusta el lateral chileno Mauricio Isla, que termina su vínculo con el Fenerbhace de Turquía, el próximo 30 de junio. El trasandino deberá elegir entre la posibilidad de venir a Boca, retornar a Chile para jugar en la U, o quedarse en Europa. Seguramente una de las prioridades de Isla será estar en la selección chilena, por eso Boca asoma como una chance más que significativa.

Por otra parte, la comisión directiva encabezada por Jorge Amor Ameal dio marcha atrás con el aumento del 30 %, para los abonados a las plateas en la Bombonera.

POR NICOLÁS ÁLVAREZ

@NicoAlvarez1973