El nivel del río Paraná se encuentra por debajo de un metro y se trata de una histórica bajante, que según los registros de Prefectura, no se observaba desde hace unos 30 años en la capital entrerriana. Ante estos niveles se instala una nueva escala para poder medir los registros más bajos. Las previsiones del Instituto Nacional del Agua (INA) se cumplieron una semana antes de lo previsto.

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