CÓMO SOBREVIVIR AL CLÁSICO INDEPENDIENTE

La otra peor humillación de la historia

La otra peor humillación de la historia.

-Por @JorGodoy

Esa famosa “dinámica de lo impensado” sucede y sucederá. Es fútbol, y en él, la lógica muchas veces se toma vacaciones. Pero esta vez se fue muy lejos.

Un partido de fútbol se puede perder por infinitos factores. Un clásico no se puede perder con dos jugadores más durante 45 minutos sin patear más que un par de veces al arco, sin demostrar carácter, coraje, personalidad, ideas, desesperación… ¡O algo!
No hubo ni pierna fuerte y templada, ni compromiso, ni actitud, ni intensidad. Mucho menos identidad.

El sábado 15 de junio de 2013, tras caer contra San Lorenzo de local 1 a 0, se producía la peor humillación de los más de 100 años de historia para Independiente. El descenso a la segunda división fue un hecho, producto de múltiples factores como conducciones dirigenciales paupérrimas, planteles de segunda o tercera calidad y entrenadores incapaces de manejar vestuarios agrietados, en el más amplio de los sentidos.

Esa, la peor humillación de la historia futbolística de Independiente fue entonces el resultado de un proceso nefasto.

Ésta, la del clásico perdido ante Racing, por el contexto y las propias limitaciones futbolísticas y psicológicas, es “la otra” peor humillación. Y la más grande si nos limitamos a un solo partido.

“Empatamos en Córdoba con 8 hombres y fuimos campeones” repiten y repiten los abuelos de generaciones de hinchas de Independiente que conocen muy poco de gloria deportiva actualizada. Y ahora, además, cargarán en esa mochila de años sin campeonatos locales, derrotas en continuado contra los otros grandes y finales miradas por TV, con el “te ganamos con 9 y un arquero en jogging”. Y Si bien estas cosas del “folklore de los hinchas” debe quedar para ellos, no sería una mala idea que quienes tienen responsabilidades lo tomen como un punto de partida para un análisis estricto y severo.

¿Por qué sucedió? ¿Quién es el o los responsables?

Independiente Invirtió casi 45 (sí, cuarenta y cinco) millones de dólares en jugadores que –en muchos casos- estaban adentro del campo de juego frente a Racing. Los Brian Romero, Lucas Romero, Cecilio, Roa… Sin olvidarnos de los Gaibor, Menendez, Palacios, Benavídez (fallo en contra de la FIFA), Verón… La lista sigue, e incluye a Pablo Pérez, por el que también se pagó para que se vaya, y a entrenadores que fueron ensamblando fracaso tras fracaso, hasta llegar a un Lucas Pusineri, “barato y con espaldas ante los hinchas” al que le entregaron una tenaza y le pidieron que no deje hundir al Titanic.

El “fijate de donde venimos” ya dejó de ser excusa. El “veamos lo que está pasando” debería ser la frase del momento.

Para muchos de los enojados hinchas de Independiente, el partido frente a Fortaleza carece de toda importancia. Para los que toman decisiones, el encuentro ante el equipo brasileño debe ser el que empiece a brindar respuestas y despejar dudas.

 

Foto: Infiernorojo.com