El beach voley es, sin dudas, uno de los puntos más atractivos del Parque Verde de los Juegos Olímpicos de la Juventud.

Y para que ello sea de esta manera, las animadoras son claves.

Los chicos y las chicas, voluntarios, juegan constantemente con las tribunas interactuando con ellos y haciéndolos “jugar” el encuentro. La música pegadiza. Y la bazookas lanza remeras forman parte del espectáculo fuera de la arena.

En un marco de público que desbordó las instalaciones y dejó afuera a unas 300 personas, jugaron ante la dupla suiza una cordobesa (Delfina Villar) y una platense (Brenda Churín).

Ellas recibieron todo el aliento del público y más allá de la derrota (23-25, 21-17 y 15-7) fueron reconocidas.