Esta semana, la Secretaría de DDHH de la Nación y el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación por primera vez en la historia argentina se hicieron responsables y pidieron perdón a una sobreviviente de violencia de género.

El Estado asumió la responsabilidad internacional en el caso de Olga del Rosario Díaz, quien a pesar de haber realizado denuncias por violencia de género no contó con ninguna medida de protección por parte del Poder Judicial al momento de ser víctima de una tentativa de femicidio.

El 24 de marzo de 2017 Olga del Rosario Díaz fue víctima de un intento de femicidio por parte de su ex pareja quien la apuñaló en repetidas ocasiones. Por las heridas, la mujer permaneció en terapia intensiva durante 45 días. "Esto le pasa a las víctimas que no son escuchadas y muchas mueren", aseguró .

Si bien la víctima había realizado una denuncia poco tiempo antes, al momento del ataque no contaba con ninguna medida de protección "fuí amenazada de muerte y el Estado no me escuchó y no me cuidó. Quiero un cambio protocolar, que las mujeres sean resguardadas, escuchadas y cuidadas."

Por esta situación, el Estado argentino fue denunciado ante el Comité para la Eliminación de la Discriminación Contra la Mujer (CEDAW) por incumplir sus obligaciones para prevenir hechos de violencia de género.

El 23 de octubre de 2019 se firmó el Acuerdo de Solución Amistosa entre el Estado nacional y la Defensoría General de la Nación, que incluyó el reconocimiento estatal de que el tratamiento judicial dado al caso no tuvo en cuenta los tratados internacionales de Derechos Humanos y, en especial, la Convención sobre la Eliminación de todas las formas de Discriminación Contra la Mujer.