“Una vez me crucé con él y realmente me dio miedo”. Antonella Moretti contó así un encuentro que tuvo con el asesino de su hermana Luciana, Pablo Cuchán.

Cuchán pasó el último fin de semana detenido tras ser acusado de intentar ahorcar a una chica, además de chocar su auto y negarse a hacer los test de alcoholemia y drogas.

Cuchán estuvo 11 años en la cárcel luego de ser condenado por asesinar, descuartizar y quemar en una parrilla a Luciana Moretti en octubre de 2004.

“Yo entiendo la postura de la Justicia, pero él tiene antecedentes, incluso antes de lo que pasó con Luciana…”.

Esa fue la respuesta de Antonella ante los argumentos de la Fiscalía para darle la libertad a Cuchán: “No registra antecedentes y la condena por el homicidio de Moretti aún no está firme".

El condenado se negó a hacerse el test de alcoholemia, lo que es una presunción de que estaba alcoholizado. Entre las reglas que debía cumplir precisamente para estar en libertad se le prohibía consumir alcohol o drogas.

“Cómo le explico a mi abuela lo que está pasando. Hay cosas en las que no quiero meterme porque termino amargada”.