Báltasar “Chato” Álvarez, presidente del Centro de Jubilados de ATE, conversó con radio Nacional Neuquén y dijo que “es sorprendente la situación financiera de ISSN (Instituto de Seguridad Social de Neuquén), es crítica”. Primero que nada cuestiona que habiendo representantes en el Consejo de Administración de los trabajadores legislativos, de la educación, de los trabajadores del Estado, de los municipales, de los judiciales” no haberse enterado por ellos y, no a través de un medio periodístico. Confiesa que le “hubiese gustado haberse enterado por los propios representantes de los trabajadores o de las distintas organizaciones que integran el Consejo de Administración, les hubieran hecho conocer esta situación”. “El déficit es muy preocupante porque es de 74.000.000.000 de pesos”, detalló Alvarez. Luego agregó que es necesario saber “cómo se llegó a esta situación”.
“Hay que dar un debate entre todas las organizaciones que tienen injerencia en la obra social y rápidamente arrancarla al gobierno la decisión política de arrancarle ese déficit, que no será fácil pero no hay que quedarse dormido. El riesgo de esto, será que van a querer subir la edad jubilatoria, subir el aporte del trabajador o traspasar la caja a Nación. Y con ninguna de estas tres cosas, es para mí, es la solución”.
Baltasar Álvarez se mostró sorprendido con la declaración del gobernador electo en una conferencia de prensa que expresó que no tenía información sobre el estado financiero de ISSN. Por eso razón, explicó Alvarez, “vamos a firmar un petitorio con los compañeros de toda la provincia, con la intención de entregárselo al gobernador electo antes que asuma en diciembre para que esté informado”
Ante la consulta periodística sobre qué pasa con los consejeros gremiales que tienen representación, Alvarez dejando escapar el sonido de una sonrisa, dijo que “no he tenido noticias de ellos. Sé que están un poco molesto con lo que yo manifiesto. Yo les diría que en vez de molestarse conmigo, so molesten con el gobierno, el consejo de administración, que se molesten con el colegio médico que los están estafando y no con la opinión de un trabajador, un representante del sector pasivo. Y esta es una posición que la vengo trayendo del año ´96,´97. Y que en vez de molestarse conmigo, asuman el rol que tienen que asumir”.
“En la época de Felipe Sapag y Pedro Salvatori, cuando no se podría mandar los aportes en tiempo y en forma a la obra social, se pagaban esos aportes en tierra. Producto de eso, se incorporó Ruca Malen y más de la mitad de las tierras eran propiedad de ISSN. Si usted va a Caviahue, se va a encontrar con qué está llenos de cabañas y hoteles, alguien vendió esas tierras, esas tierras eran de los afiliados de la obra social. El tema es saber quién autorizó la venta de esas tierras, sin haber consultado a sus dueños, los afiliados de la obra social”. Inmediatamente agregó otra hecho muy significativo en la historia de hechos ocurridos en la obra social provincial como fue el caso “de una denuncia que terminó un trabajador de la obra social quitándose la vida porque era parte de una estafa de casi 200 millones de pesos. Con esto, no escuché a ningún consejo gremial, ninguna organización decir al sobre esto. Y que parece que, la pérdida de la vida de este trabajador, no había que investigar más nada. Hay que investigar porque eso significa que hay un déficit que se llevaron 200 millones de pesos. No tiene que terminar -a mi entender- en la muerte de este trabajador. Sino en la investigación de toda una red que es muy parecido a la tarjeta de los planes sociales”.
