Tras participar de la Mesa de Turismo de la Región Cuyo, el presidente Mauricio Macri brindó una conferencia de prensa en donde sostuvo que los últimos nueve meses el país sufrió "seis tormentas consecutivas” y reconoció que en la actualidad, “hay mucha gente a la que le aprieta el bolsillo y espera que esta sea la última crisis”.

El presidente se refirió a los intentos de saqueos que se replicaron en algunos puntos del país, a los que definió como "organizados por pequeños grupos aislados que buscan  beneficiarse", y negó que los mismos, "respondan a algo orquestado desde los altos mandos de la política". "Tenemos que estar alerta a estas situaciones",  declaró el mandatario, quien anunció que el gobierno reforzará la presencia en comedores y merenderos hasta que la actividad económica retome la senda del crecimiento.

Macri se mostró confiado en que, tras la aprobación del presupuesto y un nuevo acuerdo con el Fondo, la economía recupere la confianza y el crédito para el sector privado que permita "poner en marcha la inversión y con ella, en marcha el país".  Además, el jefe de Estado calificó a las retenciones como un tributo "pésimo y malísimo" impuesto por las condiciones de "emergencia" y aseguró que su alícuota "se va a licuar en el tiempo".