A 100 años de la Masacre de Napalpí

Ocurrió el 19 de julio de 1924, en la reducción estatal de Napalpí, por entonces territorio nacional del Chaco, cuando el regimiento de Gendarmería de Línea y la policía local, con el apoyo de un avión militar, iniciaron una acción represiva que dejó más de 400 muertos.

El 19 de mayo de 2022 la justicia determinó que se trató de un crimen de lesa humanidad cometido en el marco del genocidio de los pueblos originarios.

Las víctimas, mayormente miembros de las comunidades originarias pertenecientes a los pueblos Qom y Moqoit, reclamaban por sus condiciones de vida deplorables y los maltratos a los que eran sometidos por parte de las autoridades.

Pedían una retribución por su labor en la cosecha de algodón o poder salir a trabajar del territorio chaqueño hacia los ingenios de Salta y Jujuy, pero el gobernador de aquel territorio Fernando Centeno, que respondía al presidente Marcelo Torcuato de Alvear, les había prohibido emigrar.

Como forma de protesta, habitantes de las comunidades Qom y Mocqoi se refugiaron en las montañas cercanas.

Frente a esta situación, Centeno dispuso la represión: el 19 de julio de 1924, un avión biplano Curtiss JN-90, conocido como el Chaco II, sobrevoló la zona arrojando comida y caramelos.

En el momento que los indígenas salieron a recogerlos, 130 policías y terratenientes dispararon y los golpearon con machetes: a los hombres se les mutiló o se les decapitó para colgar luego su cuerpo, mientras que las mujeres fueron violadas sexualmente.

Las víctimas fueron estimadas en 423; alrededor de 38 niñas y niños lograron escapar pero luego, al menos la mitad de ellas y ellos, fue entregados como sirvientes en las localidades de Quitilipi y Machagai mientras que el resto murió en el camino.

Sólo quince adultos lograron sobrevivir y el 5 de abril de 2023 murió Rosa Grilo, la última sobreviviente.

El silencio sobre el acontecimiento duró décadas hasta que, en 2008, Melitona Enrique relató lo ocurrido.

Desde 2014 la Unidad de Derechos Humanos de la Fiscalía Federal de Chaco investigó la masacre, bajo la dirección del fiscal Ad Hoc Diego Vigay, como crimen de lesa humanidad.

Gracias a ello, en 2018, fue entrevistada Grillo, quien había logrado salvarse junto a su madre.

En septiembre de 2021, la jueza federal Zunilda Niremperger habilitó un juicio para investigar lo sucedido y buscar una reparación histórica para las comunidades Qom y Moqoit.

Durante el proceso se expusieron testimonios escritos y orales de sobrevivientes así como de investigadores que trabajaron en la reconstrucción de la memoria histórica del acontecimiento.

Finalmente, el 19 de mayo de 2022, se dictó sentencia donde Diego Vigay señaló que ‘‘La masacre de Napalpí no fue un hecho aislado, fue un genocidio indígena planificado desde el Estado’’.

Recordamos este hecho a través de registros sonoros reunidos en un informe especial de Causa Pendiente, programa emitido por AM 870, y conservado en el Archivo Histórico de Radio Nacional.