Es en Hilario Ascasubi, una localidad del sur de la provincia de Buenos Aires, tiene una presencia récord de estas aves nativas. Hubo hasta una marcha pidiendo medidas, cortes de luz diarios y una comunidad dividida por los loros. El director de la Unidad Municipal de Hilario Ascasubi, José Luis Sauer, explicó lo que sucede allí y las complicaciones que esto trae a los vecinos.

"Están en el centro de la localidad, se comen los cables de la luz y de internet. Afilan sus picos, mejor dicho. Ensucian las plazas y hay que baldear todos los días. Además en la calle es imposible hablar por telefóno", contó.

Sauer mencionó que el problema se intentó solucionar con las luces láser y hoy "ya no lo respetan más". "Están trabajando en el tema, y viendo qué puede ahuyentarlos", explicó. "Esto ocurrió desde siempre, pero antes dormían en plantaciones. Ahora no se sabe qué es  lo que les atraen que llegan hasta el centro de la localidad", agregó.