CHARLAS DE LIVING NEUQUÉN

Florencia Werchowsky: “En los sótanos se tejen las conspiraciones”

La bailarina, periodista y escritora pasó por el living de “Tampoco es para tanto” y habló acerca de cómo nace el libro “El telo de papá” y comentó que “siempre crecer en un pueblo tiene un gran potencial narrativo porque en general la gente se aburre, pero en mi caso no me aburría porque era la hija del dueño del telo del pueblo y eso hacía que estuviera plagado de narrativas alrededor.” Por su parte, comentó que “en mi vida adulta cuando charlaba en una reunión, fiestas, bares o reuniones sociales y se enteraban que era la hija del dueño del telo de un pueblo yo sabía que tenía un público cautivo por un tiempo y aprendí a contar la historia”. A la hora de pensar en un libro explicó que “las historias reales tenían tanta fantasía que tuve que crear un verosímil o sea poner paños fríos a las historias que conocía”.

Florencia Werchowsky comentó que “en mi rol como bailarina del Teatro Colón también me pasaba lo mismo cuando charlaba con otros y en parte entendí que ahí había otra historia”. Recordó que “me fui de Allen a los 11 años acompañada de mi mamá para hacer las pruebas para entrar al elenco de bailarines del Colón y pude entrar que no es poco y también salí que tampoco es poco”. Agregó que “tomé la decisión de dejar de bailar a los 18 años, junté toda mi ropa de danza y fui esa mañana como todas las mañanas al Colón y regalé todo, salí de ahí y me hice un tatuaje que en ese momento era como terminar de afirmar que no iba a ser más bailarina”.

“Volví al Colón para hacer una puesta experimental de Las bailarinas no hablan, fue interesante porque en el ballet clásico los bailarines ponen el cuerpo pero nunca la voz. Tomé contacto nuevamente con quienes habían sido mis compañeros de danza y junto con Diego Voloschin construimos la música de esta pieza experimental con la voz de estos bailarines”.

La escritora explicó que “el centro experimental del Teatro Colón es un espacio para los artistas que buscan moverse desde un lugar menos formal y con disciplinas dialógicas. Esto funciona en el subsuelo del Teatro Colón y pienso que no resulta casual ya que en los sótanos se tejen las conspiraciones”.

Por último, otra de las piezas que llevó a cabo con adultos mayores fue “El dios de internet” comentó que “lo que pasó fue que en el marco de la pandemia nos llamaron del Centro de Jubilados 25 de mayo de Villa Urquiza y trabajamos de manera virtual con alrededor de 60 adultos mayores y a partir de las conversaciones a partir de un disparador empezamos a hacer esta propuesta que se mezcla con lo documental”.