ÁREA DE GENERO SANTA CRUZ

Ley 26.862: la ley que ayuda a soltar el reloj

Hoy nos ponemos los anteojos violetas para mirar el reloj. El tiempo, y su paso, es uno de los más grandes aliados del sistema patriarcal y sus mandatos. Tener una pareja estable, casarse, tener hijes, ser una profesional exitosa, estar en forma y bella, todo esto antes de los 30 años. Pareciera que después ya no tenemos vida.

En una campaña que lanzó “Mujeres que no fueron tapa”, llamada “Hermana soltá el reloj”, muchas mujeres contaron esa sensación de estar fracasando o estar perdiendo el tiempo por no cumplir con estos mandatos antes de los 30.Y uno de los más fuertes, donde existe un tiempo real, el biológico, es el de la maternidad. Por eso visibilizamos una ley que posibilita extender un poco los tiempos del reloj y además es una de las formas de cumplir el deseo de ser madres y/o padres.

Hablamos de este tema hoy porque el 5 de junio de 2013 fue sancionada la Ley 26.862 de Técnicas de Reproducción Asistida o también llamada de Fertilización Asistida, que establece el acceso integral a los procedimientos y técnicas médico-asistenciales de reproducción médicamente asistida.

La reproducción médicamente asistida es el conjunto de tratamientos o procedimientos médicos necesarios para lograr un embarazo. Y existen dos tipos de tratamiento: las técnicas de baja complejidad donde la fecundación se da dentro del aparato de reproducción femenino, como por ejemplo la estimulación ovárica y la inseminación intrauterina. Y las técnicas de alta complejidad donde la fecundación se da fuera del sistema reproductor femenino, como por ejemplo la fecundación in vitro.

Los tratamientos, que son cubiertos por las obras sociales y las entidades de medicina prepaga,  se pueden realizar en los establecimientos que estén inscriptos en el Registro Federal de Establecimientos de Salud (REFES) de la Dirección Nacional de Regulación Sanitaria y Calidad en Servicios de salud, dependiente del Ministerio de Salud. Y en  caso de  no tener obra social, lo debe cubrir el sistema de salud pública.

Y vamos al dato que nos ayuda a soltar el reloj: los tratamientos de fertilización asistida se pueden realizar hasta los 44 años si usan los propios óvulos, y hasta los 51 años si se usan óvulos donados.
Inka von Linden