Entrevistada por Radio Nacional Formosa, la activista del colectivo trans Agrupación Nelly Omar, Paula Eva Arraigada, celebró los logros de grupos sociales invisibilizados, como el cupo laboral trans o la instrumentación del Documento Nacional de Identidad no binario, que mantiene a la Argentina a la vanguardia de los derechos humanos, explicó en qué consisten las identidades no binarias y criticó la actitud del academicismo en torno al análisis y definiciones de los colectivos.
“Las identidades no binarias habían sido invisibilizadas, tanto por la sociedad como por el estado, pero que en realidad venían de larga data, lo que hoy se hace es reconocerlas a través del DNI, un reconocimiento que es muy importante, no solo porque marca que el país sigue siendo vanguardia en materia de derechos humanos, sino porque permite el ejercicio de la libertad de los, las y les individues, porque este no es un derecho que va en contra de las personas binarias, sino lo que permite es que cada uno, cada una y cada uno tenga la libertad de elección sobre su cuerpo y sobre su identidad”, expresó.
Arraigada destacó el liderazgo de Alberto Fernández, el trabajo de la ministra Elizabeth Gomez Alcorta o Eduardo De Pedro (ministerios de la Mujer, Genero y Diversidad e Interior, respectivamente) de legisladoras como Cristina Álvarez Rodríguez, o de la abogada feminista Natalia De la Torres.
Pero también instó a enorgullecerse del “pueblo que tenemos” puesto que para alcanzar estas conquistas se deben a decisiones políticas y por el aval que encuentran los gobernantes en la conciencia colectiva de la ciudadanía.
La fusión de lo no binario
Consultada acerca de la compresión de este nuevo escenario público de reconocimiento de derechos, Paula Arraigada analizó: “lo primero que hay que tener en claro es el respeto a la otra persona. En el caso de las identidades autopercibidas, las feminidades trans son “la”, las masculinidades trans son “el”; y quienes no tienen autopercepción binaria son “les”. En el caso de las mujeres trans o los varones trans, somos claramente visibles, con un género marcado. Nosotras tenemos senos, nos pintamos los labios, tenemos ciertos rasgos que indican la feminidad. En las personas no binarias esos rasgos, esos detalles pueden ser masculinos y femeninos”.
Colectivos frente a la academia
En nuestro país se desarrolla un debate para teorizar todo este nuevo marco conceptual que genera una sociedad más abierta, moderna y respetuosa, donde “estamos tratando de generar una teoría que sea lo suficientemente clara como para que cualquiera pueda entender”. En ese sentido alertó sobre las extensas teorizaciones de la academia, que complejiza y “apura” a la sociedad, pretendiendo llevar a los colectivos a lugares para los cuales la sociedad aun no está madura para comprender.
