POR DANIEL CORUJO TENIS

Y un día... volvió Nadal

Algunos se preguntaron por que Nadal no había llegado a la final en Montecarlo. O porque había tenido en las primeras rondas de Barcelona actuaciones “regulares” contra un bielorruso 110 del mundo que le sacó un set o una versión desteñida de Nishikori. Bueno, Nadal respondió este domingo de la mejor manera, ganando una de las mejores finales del tradicional Conde de Godó.

Y un día...volvió Rafa.

El manacorí sumó su duodécimo Godó en una final memorable. Derrotó al griego Stefano Tsitsipas por 6-4, 6-7 y 7-5 en un partido que duró casi cuatro horas.

Esta victoria devolverá a Rafael Nadal al segundo lugar del listado internacional de ATP, dejando al ruso Medvedev tercero. Fue un “prestamo” de Rafa.

Nadal pudo haber cerrado el match en dos parciales ya que tuvo dos match points en el 5-4 del segundo set. Pero el griego los levantó. No los desperdició el español, los ganó Tsitsipas.

Y pudo haber perdido la final con el 5-4 de Tsitsipas en el capítulo final que tuvo una pelota de partido, pero Rafa la salvó. Y desde allí fue imparable hasta terminar tirado en el polvo de ladrillo de cara al cielo.

Como terminó la tarde después de la premiación? Con el tradicional chapuzón en la piscina del Real Club de Tenis de Barcelona. Ya le pusieron el nombre de la cancha central a Nadal. Alguno pensará en ponerle también ese nombre a la pileta. Al fin y al cabo se tiró más veces que ninguno...