No hay dudas que la pandemia golpeó más fuerte a los tenistas sudamericanos. No solo a los argentinos. A todos. Ninguno de los 11 de esta parte de la región pudieron pasar a la tercera rueda del US Open.

Más allá de los rivales, el nivel o la superficie, argentinos, brasileños, chilenos, bolivianos y, en menor medida, uruguayos estuvieron entre 2 y 3 meses sin tocar la raqueta. Sin entrenar en cancha.

En Europa y Estados Unidos arrancaron mucho antes a jugar. No es excusa, es una realidad que explica, en parte, los resultados tenísticos. Es técnico.

En primera vuelta se fueron los argentinos Diego Schwartzman, Leonardo Mayer, Guido Pella y Federico Delbonis, el uruguayo Pablo Cuevas, el boliviano Hugo Dellien y los brasileños Thiago Monteiro y Thiago Seyboth Wild.

En segunda quedaron eliminados el chileno Cristian Garín, el cordobés Juan Ignacio Lóndero y el santafesino Federico Coria.

El cordobés Lóndero apuntó: “Creo que los sudamericanos estuvimos mucho más tiempo parados que los europeos. Hablando con (Ricardas) Berankis, de Lituania, me dijo que él había jugado 5 torneos exhibición antes de venir acá, a Nueva York, y que le hizo bien mentalmente. Vinimos en desventaja".

El US Open fue, para todos los sudamericanos, apenas el segundo torneo que jugaban desde principios de marzo. Y Coria, más allá de su alegría por haber jugado su primer Grand Slam, fue por ahi...

“Una cosa es entrenar, yo lo hice bastante con Schwartzman cuando habilitaron en Buenos Aires, y otra bien distinta es jugar. Muchos sintieron que no estaban en ritmo”, dijo el hermano de Guillermo.

Varios jugadores europeos tuvieron bastante tiempo menos de “descanso forzado” y retomaron antes las prácticas.

Varios jugaron exhibiciones -tal como Novak Djokovic y su polémico Adria Tour por los Balcanes-, el inglés Cameron Norrie, quien eliminó a Schwartzman y a Coria, disputó el “Battle Of The Brits”, un certamen nacional inglés con varias etapas, en el que finalizó tercero. Además de torneos en Austria (donde jugó, entre varios, Dominic Thiem), Alemania  (juntó a tenistas de ATP y nivel challenger) y la Copa Presidente en Praga, República Checa.