La directora de Derechos Humanos del Municipio afirmó que "las armas que le da el Estado a la policía no son para alterar el orden democrático sino para cuidar a los ciudadanos" y aseguró que lo ocurrido ayer en la Quinta de Olivos fue un acto de sedición.

La funcionaria dijo que lo sucedido como gesto es muy fuerte y que debe ser repudiado por toda la sociedad, todas las instituciones y por todos los partidos políticos.

En diálogo con Nacional, Otharan calificó de nefastos a algunos policías que se mostraron ante los medios y critico a un sector del periodismo que naturalizó la protesta y que atrás del reclamo vendrán otros de sectores que necesitan una mejora como es el de la salud.