Marina Shifrin, abogada de la familia de Guillermo “Coco” Garrido, quien fuera encontrado sin vida la noche del 13 de enero de 2011 en un calabozo de la comisaría 12 de El Bolsón, en diálogo con Radio Nacional, afirmó que la causa fue “archivada por la provincia de Rio Negro” a partir de la decisión de fiscales de El Bolsón y San Carlos de Bariloche, por lo que “hemos hecho una denuncia en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos”.
Al momento de su detención, Garrido, quien tenía 24 años y no poseía antecedentes penales, conducía un Renault 12 y en un control de tránsito lo demoraron porque supuestamente había tomado alcohol. Alrededor de las 21,40 horas lo llevaron a la comisaría, a las 21.45 horas fue trasladado hasta el hospital local para constatar su estado de salud y luego lo alojaron en el calabozo. Según la versión que el fiscal jefe Martín Lozada sostuvo en el juicio, los policías que estaban a cargo no le sacaron el cinturón y a las 23 horas, lo hallaron ahorcado.
En dicho juicio, los policías fueron acusados de negligencia y absueltos. Se ordenó una nueva investigación con el eje en el homicidio, sin embargo, el nuevo fiscal dijo no tener alternativas para avanzar, por lo que la causa se archivó meses atrás, durante la pandemia. “El bien principal que protege nuestra Constitución (Nacional) es la vida y el Código penal también, entonces si protege la vida, ellos (los fiscales) tienen que investigar” sentenció y agregó que cómo la muerte se produjo en una comisaría, “es una caso de derechos humanos que dejan sin investigar”.
“La provincia tiene mucha historia de impunidad con los derechos humanos”, advirtió, enumerando numerosos casos con la participación de fuerzas policiales y que no aún no tienen resolución.
Mañana miércoles 13 de Diciembre se cumplen 10 años del trágico suceso.