Hugo Molares, padre del fotoperiodista Facundo Molares, preso en Bolivia desde el golpe de estado en ese país, manifestó a Radio Nacional el agravamiento de su estado de salud y dijo: “a él le trajeron de emergencia el lunes (16/11) a la mañana, le habían llevado el viernes (13/11) y le habían atendido muy superficialmente y lo volvieron a llevar al penal, lo volvieron a traer el lunes (16); le hicieron análisis, radiografía.
Ahora la médica lo encontró con un líquido en los pulmones y determinó que debía quedar internado, ya habíamos gestionado una orden de internación en Santa Cruz de la Sierra, pero hasta que esa orden de internación llegaba a La Paz iba a tardar como tres días porque tenía que mandarla por correo, tenía que firmarla tres funcionarios en el camino, y bueno toda una burocracia increíble.
El tema es que para internarlo le tenían que hacer el hisopado, el testeo y encima de todo lo que tiene es coronavirus, así que bueno quedó internado en esas circunstancias en un pabellón especial y acá estamos toda la familia con el corazón en la boca.
Un año de angustia, de impotencia, de bronca porque fue toda una maniobra que hizo la repugnante dictadura, que ocupó el gobierno en Bolivia durante un año y maltrató a Facundo como maltrató a tantos miles de bolivianos.
Facundo estaba haciendo un trabajo periodístico y el realmente es una víctima, le metieron en una causa donde hay dos individuos que fallecieron, que eran golpistas y que estaban encima provocando disturbios y que no se sabe quién los mató, porque aparentemente hay nuevos indicios de que hubieran sido ellos mismos para tirarle los muertos a la gente del MAS.
Mi hijo está ahí, quedó enredado en la maraña judicial y nos está costando un montón, ya los presidentes mismos, Arce y Fernández lo han tenido en la agenda y ha concluido que Facundo es un rehén político.
Es un preso político, no tienen absolutamente nada en contra de él, es absolutamente inocente, es una víctima.”