Roland Garros, el tercer y último Grand Slam del año tendrá público, sólo en sus tres estadios principales, y “burbuja sanitaria” para los tenistas que se podrán alojar en los dos hoteles oficiales para la ocasión y no podrán alquilar casas como muchos hacen habitualmente, en especial los tenistas con mejor ranking.
También se informó que sólo estarán autorizados dos invitados o acompañantes por participante, que la qualy, una semana antes, será a puertas cerradas, y que apenas se acreditará al 50% del periodismo que se acepta normalmente, con prioridad para los medios europeos.
Roland Garros aceptará un máximo de 11.500 personas por día. Cinco mil espectadores en la Philippe-Chatrier y en la Suzanne Lenglen. Más 1.500 en el estadio tres.
También informó la organización que los estadios se dividirán en tres zonas diferentes y separadas, intentando mantener espacios amplios entre diferentes entradas. De este modo, no se podrá pasar de una zona a otra en mitad de un partido.
La mascarilla o barbijo será obligatorio en todo momento, y también en las tribunas durante los partidos.
Por el perjuicio económico que tendrá, a pesar de hacerlo con público, la Federación de tenis de Francia, los premios totales del campeonato parisino se reducirán de 43 a 38 millones de euros.