COLAPSO SANITARIO Mendoza

Evalúan protocolo para decidir a qué paciente se le coloca respirador o no

Así lo reconoció con pesar Uma Flores, referente de la Asamblea de trabajadoras y trabajadores autoconvocados quien explicó que se avanza en un protocolo para dar un marco a esas difíciles decisiones. La profesional expresó a la programa Muchas gracias que alrededor de "70 prestadores de salud del  Hospital Central llevan 6 meses sin cobrar su salario" y ni siquiera cuentan con ART.

Flores explicó que las y los trabajadores aún no han percibido su sueldo que ronda los 20 mil pesos y que desde el gobierno les aseguran que la demora obedece a problemas administrativos. "Son profesionales que ingresaron a trabajar a los sectores de terapia intensiva y aún no reciben su sueldo".

Finalmente, Flores aseguró que sus compañeras de trabajo vienen denunciando esta situación desde marzo, pero "mas allá de las amenazas y de toda la persecución que sufrimos por dar esta nota por ejemplo seguimos haciéndolo , sabemos que nuestra situación es precaria porque nos hacen firmar contratos cada tres meses".

Por otra parte, la Fundación Salud Inclusiva advirtió en el último informe del grupo Epidemiología en Alpargatas que esta situación se multiplica en muchos hospitales de la provincia. "Nuestras estimaciones indican que si se continúa con los mismos niveles de apertura comercial y actividades no esenciales; a mediados de la semana 38 (entre el 16 y 19 de setiembre) Mendoza alcanzará los 20300 casos. Esto implica un ritmo de 900 casos diarios aproximadamente", asegura el informe.

"Si consideramos el ritmo en que las personas se recuperan o fallecen; para ese entonces, estimamos entre 12-14 mil personas infectadas activas lo que implica considerar la necesidad de contar con una disponibilidad de entre 500-600 camas de Unidad de Terapia Intensiva (UTI) sólo para personas con COVID19. Esta cantidad de camas UTIs implica casi el doble de las totales con las que cuenta todo el sistema de salud provincial", afirman los especialistas.

En el informe también se hace referencia a la situación de precariedad laboral existente. "Cabe destacar que el último pase a planta de trabajadoras y trabajadores de la salud fue en el año 2015. Personal Médico y Kinesiológico En el mismo gráfico podemos ver que el personal médico y Kinesiológico alcanza en la mayoría de las instituciones la cantidad estipulada por la SATI y reglamentada por el Ministerio de Salud de la Nación. Aquellos efectores donde no se visualizan datos sobre kinesiólogxs es porque no se pudo acceder al dato, no por ausencia de profesionales".

"Sin embargo, es importante remarcar lo manifestado por muchos informantes de las distintas Unidades de Terapia. Todxs los y las profesionales (también de enfermería) trabajan en dos o más instituciones. Esto implica que si alguna de estas personas debe ser aislada por ser contacto de caso sospechoso o tener COVID, no sólo resiente un servicio de terapia intensiva, sino dos o tres".

El informe completo